sábado, 10 de noviembre de 2012

¡La bolsa o la vida! versus... ¡La casa o la vida!

Ella no contaba con que la crisis de la empresa familiar tuviese aquellas consecuencias. Había un patrimonio de donde sacar y se llevaron todo, todo, todo... Mucho más de lo que en justicia correspondería para satisfacer la deuda.

Ella, a pesar de su juventud, hizo lo que pudo. Negoció con el banco y este dijo sí. Pero, a falta de firma, una semana después, arrepentido, dijo ¡NO! Quería más... mucho más. Nunca es suficiente para... ¡la bestia!

Ella recogía cosas... llenaba cajas cuando el secretario del juzgado apareció con un cerrajero en su casa, con objeto de proceder al desahucio. Tuvieron alma y concedieron un par de días para que se llevara a cabo la mudanza de un modo... humanitario. Entonces no había plataformas que ayudasen... ni tampoco se echaba a la calle a cientos de familias; el drama era individual, hoy... es social. A fecha actual quedan un millón y medio de desahucios por ejecutar :-(

Ella no sabía que, como los suyos, únicamente era una ficha más de dominó a la que un fuerte soplo de viento derribaría... Goliath contra David... sólo que en la vida real vence el gigante, por más que se apunte certeramente con la honda.

No hace ni un mes José Miguel se ahorcó el día que iban a desahuciarle. Otro ciudadano se tiró por la ventana a la mañana siguiente, por la misma razón. Ayer, Amaya se arrojó por el balcón muriendo de inmediato.

Hay días en que no cabe espacio para la indignación ni la vergüenza ajena, de grandes que son. Hay días en que sólo queda hueco para la tristeza... y pesa tanto que parece un océano de acero.

Quizás sea porque ella... era... soy yo.



6 comentarios:

  1. Ayer o antier me enteré de esa noticia y me pongo a pensar que tan angustiado se debe de sentir uno como para quitarse la vida. Eso que está pasando ya no es normal, me pregunto cuanto tiempo deberá pasar para que se arregle todo ese asunto y, sobre todo, cuanto tiempo pasará para que alguien en los altos mandos del poder realmente haga algo por el país.

    Ojalá que a ti no te esté tocando tan intensamente el problema, aguanta amiguis que siempre vendrán tiempos mejores, yo no quiero que tu salgas volando por la ventana, mejor prefiero que te eches un clavado en el mar.

    ¡Abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sucedió hace unos veinte años Myriam, pero uno es su pasado, su presente y el futuro que aún no alcanza... de algún modo también. Forma parte de la historia personal y la experiencia, supongo, dota de mayor empatía para ponerse en la piel de otro que pasa por algo que se conoció... Y claro, la tristeza es un poco más triste que para el resto (también supongo).

      Imagina el grado de desesperación que se ha de tener para llegar a suicidarse. Imagina por ejemplo a Amaya, a la que ni siquiera su hijo de 21 años ató a la vida. Es terrible que se rescate a bancos que hacen negocio con codiciosa usura y que se hunda a las personas. Es abominable. Una perversión del sistema.

      Hay cosas... situaciones... vivencias que rompen a un ser humano. Unos logran recomponerse, pero con muescas impresas como vestigio... Otros quedan malogrados... y algunos más tan hechos trizas que mueren en vida... o en muerte.

      Parece ser que ahora los políticos van a tomar cartas en el asunto; esperemos, ya que por el momento ningún gobierno ha tenido la valentía. Y en medio del panorama que hay en el país, una buena noticia: una caja de la comunidad autónoma en la que residía la última víctima, y que tiene la mayoría de préstamos hipotecarios de la zona, ha ordenado esta misma tarde suspender temporalmente los desahucios. Ojalá y sea un comienzo.

      Un abrazo guapetona transoceánica... pero a mí si me gustaría despegar de mi ventana... ¡con capa voladora de Superleve en acción! :-D

      Eliminar
  2. Te mando un fuerte abrazo Leve. Por el pasado, y por el presente recuerdo.. :-(

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Otro boomerang para ti, Víctor, que a fin de cuentas no es más que un abrazo de ida y vuelta. ¡Son más prácticos y energéticos! :-)

      Pd. Acabo de dejar el bote de mermelada en el fregador y el plato que tenía las tostadas lo he metido en el frigorífico... ¿¡Será cosa de la edad!? :-DDDD

      Eliminar
  3. El problema, el fondo del asunto, es una enfermedad muy extendida, el egoísmo, el tener más sin necesitarlo, por imitación, sin saber por qué.Y esta enfermedad no sólo afecta a políticos, banqueros y demás piezas del sistema... ha contagiado a muchos ciudadanos de a pie...
    Por eso, lo que ocurre hoy día no se cambia sustituyendo políticos o cambiando leyes, es necesario un cambio más profundo, desde el interior de la mayoría de nosotros, realizar una catarsis, si no estaremos repitiendo errores y sólo cambiarán los actores.
    Tal vez, pensar esto pueda parecer utópico, creer en cuentos de hadas. Pero pienso que más utópico es creer que podemos sobrevivir mucho tiempo más como especie comportándonos como lo estamos haciendo hasta ahora.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Egoísmo... codicia... avaricia... competitividad... Reproduciendo unas sabias palabras de Miliki... “en vuestros corazones podéis conservar siempre un gran poder, el poder de transformar lo que os rodea, de inventar mundos, de hacer que las cosas cobren vida. El maravilloso poder de imaginar”... Ojalá y esta crisis sirva, Sangón, para que todos reflexionemos sobre la sociedad que hemos construido hasta la fecha... y sobre los valores que queremos nos guíen en adelante. Ojalá sirva de oportunidad para forjar ese nuevo mundo, más justo y amable, que deseamos... Ojalá podamos verlo, aunque sólo sea el germen de la bendita utopía, que yo sí creo se va sembrando. Haremos lo que esté en nuestra mano, ¿a que sí? ;-)

      Eliminar

Algo me dirás... ¿no? ;-)

:) :-) :)) =)) :( :-( :(( :d :-d @-) :p :o :>) (o) [-( :-? (p) :-s (m) 8-) :-t :-b b-( :-# =p~ :-$ (b) (f) x-) (k) (h) (c) cheer