Musa, joven africano, se encontraba ayer en su casa, por la mañana, cuando escuchó unos gritos procedentes de la calle. Se asomó a la ventana y vio que un hombre atacaba a una mujer. Bajó todo lo deprisa que pudo cuando Arancha, de 30 años de edad, ya agonizaba en el suelo, desangrándose. El ex-marido, que esperaba escondido, la sorprendió por la espalda apuñalándola una y otra vez. Mientras era atendida por unos viandantes, Musa corrió tras el agresor sin tener en cuenta a otros testigos que le pedían que no le persiguiera, pues llevaba el cuchillo en sus manos: “Hay que ayudar a la gente”, respondió el muchacho, cuando todo había pasado y le preguntaron sobre su actuación.
Logró retenerle, junto a otros dos hombres, no muy lejos del lugar del crimen, a la espera de que llegase la policía. En la persecución el agresor se había desecho del arma y dicen que preguntaba, aturdido, qué había pasado... si la había matado...
Es 9 de mayo de 2011 y el próximo día 15, la hija mayor de Arancha haría la Primera Comunión.
Es 9 de mayo de 2011 y el hijo menor de Arancha también se ha quedado sin madre.
Es 9 de mayo de 2011 y la existencia de no poca gente nunca volverá a ser la misma porque Arancha ya no está... y por cómo ha dejado de estar.
Es 9 de mayo de 2011 y son dos las mujeres en mi ciudad muertas en lo que va de año, a manos de hombres que tuvieron que ver con ellas sentimentalmente.
Es 9 de mayo de 2011 y el mismo día que Arancha, otra mujer fue degollada por su pareja en Madrid. Una más en Gerona, el viernes.
Es 9 de mayo de 2011 y las víctimas alcanzan la cifra de 23 a día de hoy; sólo en España. Su bien más preciado... sus vidas, les han sido arrebatadas violenta... gratuitamente.
Es 9 de mayo y vuelvo a sentir ese escalofrío que me recorre de pies a cabeza cada vez que la suma aumenta.
Es 9 de mayo y aún tengo que escuchar, con más frecuencia de la que desearía, que los inmigrantes vienen a este país únicamente a delinquir y robar el trabajo que pertenece a los oriundos del lugar por derecho de nacimiento.
Es 9 de mayo y reitero y reiteraré... porque rechazo y rechazaré.
Es 9 de mayo... tiempo de primavera, tiempo de flores... flores para todas ellas...
Logró retenerle, junto a otros dos hombres, no muy lejos del lugar del crimen, a la espera de que llegase la policía. En la persecución el agresor se había desecho del arma y dicen que preguntaba, aturdido, qué había pasado... si la había matado...
Es 9 de mayo de 2011 y el próximo día 15, la hija mayor de Arancha haría la Primera Comunión.
Es 9 de mayo de 2011 y el hijo menor de Arancha también se ha quedado sin madre.
Es 9 de mayo de 2011 y la existencia de no poca gente nunca volverá a ser la misma porque Arancha ya no está... y por cómo ha dejado de estar.
Es 9 de mayo de 2011 y son dos las mujeres en mi ciudad muertas en lo que va de año, a manos de hombres que tuvieron que ver con ellas sentimentalmente.
Es 9 de mayo de 2011 y el mismo día que Arancha, otra mujer fue degollada por su pareja en Madrid. Una más en Gerona, el viernes.
Es 9 de mayo de 2011 y las víctimas alcanzan la cifra de 23 a día de hoy; sólo en España. Su bien más preciado... sus vidas, les han sido arrebatadas violenta... gratuitamente.
Es 9 de mayo y vuelvo a sentir ese escalofrío que me recorre de pies a cabeza cada vez que la suma aumenta.
Es 9 de mayo y aún tengo que escuchar, con más frecuencia de la que desearía, que los inmigrantes vienen a este país únicamente a delinquir y robar el trabajo que pertenece a los oriundos del lugar por derecho de nacimiento.
Es 9 de mayo y reitero y reiteraré... porque rechazo y rechazaré.
Es 9 de mayo... tiempo de primavera, tiempo de flores... flores para todas ellas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Algo me dirás... ¿no? ;-)