jueves, 16 de abril de 2009

Naranjas de la China ... y resto del globo (o leveteoría)

El concepto “media naranja” siempre me ha hecho gracia. Bueno, sólo desde que comencé a comprender que la historia del príncipe azul y la princesa rosa no era más que un cuento... chino. Que en la realidad los susodichos destiñen bastante ya que los que protagonizamos las relaciones (familiares, laborales, amistosas, de pareja...) somos perfectos imperfectos seres humanos. Y que podemos -o no- aceptarnos y/o aceptar a otros, pero somos paquetes completos, con luces y sombras. Espacios estos tal vez depurables, a la par que indivisibles e inevitables.
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La siguiente fase consistió en llegar a un descubrimiento que concluye en lo siguiente: no existen las medias naranjas sino naranjas completas.
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Repito: . n-a-r-a-n-j-a-s . c-o-m-p-l-e-t-a-s. Eso sí, en ocasiones -en maravillosas ocasiones-, cuando dos de ellas mezclan su zumo, paradójicamente... ¡el resultado es la leche! Vamos... lo que yo llamo mi “EL”, por aquello de mi heterosexualidad. “El amor de mi vida” dicen otros, el verdadero, etc, etc, etc... ¡será por calificativos!
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Luego están las naranjas de sabor amargo, que haberlas haylas como meigas en Galicia. Incluso “mermeladas” se comercializan. Si es que hay gustos para todo.
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Y claro, siguiendo la línea del razonamiento frutero, si no hay medias naranjas... tampoco corazones-mitad.
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Pues eso.
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5 comentarios:

  1. En mi opinión, creo que no se puede ceñir el amor a unas normas. Al corazón no le puedes decir: "cuando", ni "a quién" ni "a quién no" ni "¿por qué?"...
    Los condicionamientos sociales y educativos nos pueden hacer llamar amor a otra cosa... nos pueden confundir... Por eso creo, que hay que "mirar los mismo con otros ojos"... olvidar todos los condicionantes (como son los "conceptos") y mirar con el corazón desnudo... limpio y directo al corazón de los demás. Eso te lleva a amar irremediablemente y sin límites. Otra cosa es, que sabiendo eso queramos poner límites... encorsetar el amor, hacerlo entrar en el "molde" de lo que debe ser... Intentar eso es lo que puede doler y no el amor en si.
    Pienso, que cada uno ha de seguir su propio camino... Ser libre... que sólo hay una forma de amor, al que se añaden diversos ingredientes que le dan distintos matices...

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  2. Por fin pude visionar Man on Wire (no apta si tienes vértigo), fue toda una experiencia religiosa, y para naranjas, las valencianas. ¡Naranjito for president!

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  3. Sangon ... me encantaría que fuera como dices peeeeero ... sigo pensando que, si bien el potencial de amar sin moldes, sin aspirar a retribuciones, amor incodicional en resumen, se encuentra en cada ser humano ... lo cierto es que en la práctica, sea por condicionamiento cultural-educativo o porque nuestra naturaleza contiene una parte de egoísmo (¿o es autoestima?), la mayoría de comunes mortales lo hacemos de forma condicional. Queremos dar ... pero también recibir a cambio. A mí no me parece saludable lo de amar y amar sin medida. Claro que no soy ... por ejemplo Teresa de Calcuta. Y la menciono por ser conocida mundialmente que seguro hay “anónimos” que también merecerían nombrarlos.

    Tengo que hablar un día del amor como materia prima. Y matizar sobre sus formas de manifestarse, que es cosa bien distinta.

    Sputnik ... tuve conocimiento de “Man on wire” gracias al estupendo espacio de Nisu y sí ... una experiencia para “tocar el cielo”. Naranjito ... aún recuerdo su sonrisa, ¡aaaaaayyyy! (suspiromelancólicopositivo).

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  4. "Ama hasta convertirte en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor."
    "Da sin medida y te darán sin medidas."

    Facundo Cabral



    Cuando observo a mi alrededor, entiendo que en el amor que llamamos de pareja sólo se debe amar a una persona y que esa persona te debe amar solamente a ti, lo demás es inconcebible e incompatible con las reglas prefijadas y salirse de ellas nos conducen a miedos y todo tipo de inseguridades, incluso sufrimientos. Por eso, cuando el corazón ama a alguien que no corresponde ese amor, o a otras personas que no son tu pareja... ahí aparecen toda clase de "normas" para negar al corazón, para desautorizarlo... Pero acaso, ¿no existe o puede existir de todas formas eso que a veces negamos?

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  5. No creo que en el amor que llamamos de pareja sólo se debe amar a una persona y viceversa. Se puede amar a mucha más gente, pero de modo distinto. Personalmente no puedo tener la misma complicidad e intimidad, la misma energía amorosa, con mi prima que con mi pareja. Pero claro hablo de mí, desde mi aptitud y actitud monógama, y el mundo es ancho, con toda la gente que lo puebla, ciertamente influenciada por la cultura en la que se desarrolla.

    Habrá “parejas abiertas” que puedan y quieran hacerlo, que deseen pluralidad ... y es genial siempre y cuando quienes la forman estén de acuerdo. El problema, creo yo, viene dado cuando no hay transparencia entre lo que se ofrece y lo que se desea, cuando una de las partes no sabe que vive ... una relación de pareja abierta.

    Me gusta Facundo ... cantando, contando –espiritual o humorosamente-, escribiendo. También de su cosecha: “El futuro comienza en el presente. Ser madre, ser padre, es unir el pasado y el futuro en el presente, gracias al milagro del amor”.

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