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Yo no entiendo casi nada y me muevo torpemente, pero el espacio es hermoso, silencioso, perfecto. Yo no entiendo casi nada, pero comparto el azul, el amarillo y el viento. La tarde avanza lentamente, y yo mirando quiero ver. (Eduardo Chillida)
:p
ResponderEliminar(Gracias Víctor por la felicitación del otro día)
De nada Carlota, la que usted se merece.
ResponderEliminarLeve, menos mal que no soy envidioso... aquí, en la playa de asfalto, no se puede escribir por más que "arrasques"
por lo menos frío todavía no hace.
:P
Chata, lo mismo te digo... :-P
ResponderEliminarNi lo intentes... o te quedarás sin uñas.
¡Pues que esperanzas de escribir así en el piso! bueno, yo tengo un "jardín zen" que me regaló una ex-alumna y a veces lo pongo en la mesita de la sala y hago diseños con el rastrillo que trae pero ¡dios! ya me hace falta playita o algo diferente para estar en contacto con la naturaleza. Lo bueno es que tu te zambulles en en el mar en nombre de todos nosotros y cuando nos muestres más fotos de la playa diré: ahhh! de alguna forma yo estuve ahí tambien ;)
ResponderEliminarMenos es mas... ¡oooommmmmm!... (conste que no es coña) que diría la filosofía zen. Y menos da... otra piedra (¡qué de piedras últimamente!) Myriam, así que apáñate con el rastrillo hasta que puedas hacer una escapada. ¡Qué remedio!
ResponderEliminarPena que no exista el teletransportador-on-line... te enviaría ipso facto un pedacito del Mediterráneo. Para compensar el próximo sábado me baño a tu salud... palabrita de la niña leve.
Eso del "Mediterráneo" para los americanos tiene un toque algo bohemio. ¡SÍ! me encantaría un trozo de Mediterráneo :´´(
ResponderEliminar¡¡Quiero un trozo de Mediterráneoooo!!