Una vez más Doña Coti anula mi intención inicial que consistía en cantar contando (o contar cantando) los levesentires que me han poblado el fin de semana. Pero, como de costumbre, ella manda... y yo obedezco. ¡Cualquiera se rebela... a quien tanto revela!
Ayer hablaba de zapatos y hoy, ¿casualmente?, la Doña ha hecho que reciba un correo...
Ayer hablaba de zapatos y hoy, ¿casualmente?, la Doña ha hecho que reciba un correo...
SHOES FOR AFRICA
La marca de productos para el cuidado del calzado "Kiwi", ha lanzado la campaña "Shoe aid for Africa". De esta manera se pretende emular lo que se consiguió con la campaña de 2006 cuando se ayudó a distribuir 100.000 pares de zapatos entre gente necesitada de África. En cooperación con "Humana" y el futbolista camerunés, Samuel Eto, "Kiwi" intenta repetir, o incluso mejorar, esa exitosa campaña en el año 2009.
En algunas áreas de África, los zapatos no son un artículo fácil de conseguir para todo el mundo, incluso para algunos es un auténtico producto de lujo. El hecho de no tener un buen par de zapatos puede excluir a los adultos de conseguir un trabajo o evitar que los niños vayan a la escuela. Para muchos africanos, los zapatos están entre sus posesiones más valiosas y ponen un esfuerzo enorme en cuidar de ellos.
Las cajas estarán en los supermercados ("Hipercor" y "El Corte Inglés") durante aproximadamente un mes, dando tiempo para que los consumidores depositen allí sus zapatos. Cada semana "Humana" recogerá todos los zapatos de estas cajas y las llevará a sus almacenes. Se pueden entregar zapatos y botas de adulto y niño, zapatos prácticos, usados pero en buen estado. No se aceptan ni zapatos de tacón ni botas de nieve. Y todos los zapatos que se entreguen deben estar limpios de suciedad gruesa o barro, llevar cordones en caso de zapatos con cordones y no tener ningún desperfecto importante.
Durante el mes de noviembre y de diciembre, todos los pares de zapatos recogidos serán clasificados y limpiados en los almacenes de "Humana", puestos en bolsas individuales y enviados a África. Este proceso es crucial para asegurarse que los zapatos entregados están en buenas condiciones y que serán utilizables para la gente africana. De diciembre de 2009 hasta abril de 2010, todos los zapatos serán distribuidos en zonas rurales de varios países africanos. Estas áreas han sido seleccionadas por "Humana" y "Kiwi" y todo el proceso de distribución de los zapatos será manejado enteramente por equipos combinados de "Humana" y "Kiwi" para asegurarse de que los zapatos llegan directamente a la gente que más los necesita. Los países africanos donde serán entregados los zapatos son: Camerún, Kenia, Malawi, Mozambique y Sudáfrica.
Naturalmente, habiendo leído lo leído y visto lo visto...
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que por otra parte ya es sabido, no queda otra que levedifundirlo; incluso aquí.
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cheer
Me parece una buena acción, habrá que difundirla.
ResponderEliminarMe pongo ya mismo a buscar zapatos.
Gracias.
Un cordial saludo.
ahimsa
pero...
ResponderEliminar¿llegarán los zapatos a quienes tienen que llegar?
....tengo dudas.....
ahimsa
En varias ocasiones me han dicho: “Gran parte, si no todo, el dinero que reciben las ONG se pierde... en el camino”.
ResponderEliminarSuelo responder que existen auditorías que se supone auditan. Y en el peor de los casos... si gran parte de los ingresos “se extravían” en destino, origen, o trayecto... siempre será mejor que llegue algo a nada; aunque ese algo sea uno de diez.
En ocasiones varias me han dicho: “No tiene sentido organizar la basura en función de su tipo porque luego más de la mitad no se recicla”.
Suelo responder que determinar el porcentaje de residuos que finalmente se recicla no es mi competencia. Sí mi compromiso dividirla y depositarla en los contenedores correspondientes. El “después”... es tarea de otro... otros.
Ahora preguntas, Ahimsa: “¿Llegarán los zapatos a quienes tienen que llegar?”.
Ni idea. Pero el “si” al menos tiene la “posibilidad.” El “no”... lo único que tiene es a sí mismo.
Esa es mi leveopinión.
Pues sí Leve, cada uno debe hacer correctamente lo que le toca... si todo el mundo hiciera lo mismo, cuántos problemas se solucionarían.
ResponderEliminarPienso que el problema de la ayuda económica en metálico no es tanto que se pierda por el camino, sino que llegue justamente a manos de quienes, en esos países, son responsables directos del sufrimiento de la mayor parte de la población, y de esa forma les haga todavía más fuertes.
No tiene fácil solución el asunto, porque no ayudar tampoco es el camino.
Por lo menos, si algo tiene la posibilidad de llegar a manos de quien lo necesita son zapatos o cosas semejantes, objetos que no despiertan la codicia de nadie.
Si todo el mundo hiciera lo correcto... cuántos problemas ni siquiera serían Víctor.
ResponderEliminarUna obviedad...
ResponderEliminarPara hacer lo correcto, antes hay que saber que es lo correcto.
¿Es correcto enviar zapatos a Africa?
Por que si se envían zapatos, es que alguien tiene zapatos en exceso o de sobra, y...
¿Es eso correcto?... ¿Es correcto tener más de lo que se necesita(en todos los aspectos), cuando hay quien no tiene ni el mínimo necesario... muchos ni siquiera para alimentarse?
Ante la duda... en el gran teatro del mundo... siempre está el AMOR par intentar discernir...
¡Ops Sangón... soy una incorrecta!
ResponderEliminar¡Ay! Don Amor, Don Amor... contenta me tiene...
Yo también soy un incorrecto...
ResponderEliminarPor eso, intento poner cada vez un poquito más de amor en cada cosa que hago... aunque no siempre se consigue...
Creo que es una gran iniciativa, si alguien en el camino impide que los zapatos lleguen a su destino ya no es algo que esté al alcance inmediato de los donadores evitar, quedará en su conciencia.
ResponderEliminarMe encanta la iniciativa, acá en México sólo he visto algo similar con anteojos usados o que uno descarta por viejos o pasados de moda, hay recolectores en algunas ópticas y los distribuyen dentro de la población más desfavorecida.
Saludos!
Aquí también hubo recogida de gafas en alguna ocasión, recuerdo.
ResponderEliminarSi los zapatos se pierden, u otras tantas cosas que no debieran ocurrir suceden, no creo que quede en la conciencia de quien no tiene, Myriam.