Ya dice un refrán que todo se pega menos la hermosura. Aunque yo lo levetransformo diciendo que la belleza es lo primero que se contagia. Y claro... tanto maullar-maullar el de Cheshire en los lindes de mi patria, que me veo también de esta guisa...
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Estoy...
Pero no estoy...
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O lo que es lo mismo: de nuevo en el teatro con lleno absoluto en el auditorio para disfrutar de dos colosos del escenario...
.
¡Sssssssshhhhh... silencio que comienza la función!... ¡Móviles apagados pol Dió!
A este paso me aficiono a la “bilocación”.
¡A estar bien!... o mejor.
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Estoy...
Pero no estoy...
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O lo que es lo mismo: de nuevo en el teatro con lleno absoluto en el auditorio para disfrutar de dos colosos del escenario...
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¡Sssssssshhhhh... silencio que comienza la función!... ¡Móviles apagados pol Dió!
A este paso me aficiono a la “bilocación”.
¡A estar bien!... o mejor.
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:)
:-)
:))
=))
:(
:-(
:((
:d
:-d
@-)
:p
:o
:>)
(o)
[-(
:-?
(p)
:-s
(m)
8-)
:-t
:-b
b-(
:-#
=p~
:-$
(b)
(f)
x-)
(k)
(h)
(c)
cheer
pero qué salá que eres...
ResponderEliminarPaisana, ¿qué tal estuvo la obra?
ResponderEliminarGracias Feroz. Salá a veces, otras posiblemente almibarada porque se me fue la mano con el azúcar. Alguna exprimiré más limón de la cuenta y... ¿en ocasiones tan amarga como la quinina?... ¡Espero que no!
ResponderEliminarSanopai... la obra wonderful-wonderful. Ríes de lo que en condiciones normales no. Y reflexionas sobre cositas tales como, por ejemplo, lo irremediable de las decisiones que tomamos en nuestras vidas.
Aprovechando el contenido del programa de la obra cito a Borges:
“El porvenir es tan irrevocable
como el rígido ayer. No hay una cosa
que no sea una letra silenciosa
de la eterna escritura indescifrable
cuyo libro es el tiempo. Quien se aleja
de su casa ya ha vuelto. Nuestra vida
es la senda futura y recorrida.
El rigor ha tenido la madeja.
[...]
La firme trama es de incesante hierro,
Pero en algún recodo de tu encierro
puede haber una luz, una hendidura.”
En esa “hendidura” se encuentran en el final de sus días Julio y Pedro, que es lo mismo que decir José Sacristán y Héctor Alterio. Por ella se internan y nos guían siguiendo esa luz que termina iluminando también al público, para revelar finalmente que Julio y pedro... somos todos.
Esteeeeee... ¿ese cachito de Borges no es el que me regalaste una vez, verdad?
Víctor, ejem, ejem...
ResponderEliminar"El rigor ha tejjjjjjido..."
Esto es como lo de tu "falta". Me puedes sacar tarjeta si quieres... ¡pero no roja!
jaja ya me había dado cuenta.. te daré una creativa tarjeta roja-gris para que te la pongas con la falda.
ResponderEliminarNo, no es el mismo. Si no recuerdo mal, el mini-cuento de Borges te lo puse en un comentario poco antes del verano.. hace sólo dos meses de eso, pero parece una eternidad. Las entradas pasan volando.
Borges es muy socorrido para la blogosfera: en pocas líneas te monta una historia completa llena de significado.
Tú tampoco te quedas manca.. en un plis-plas has hecho una reseña magnífica de la obra, espero verla algún día en Madrid (ojalá no haya pasado ya por aquí, pues normalmente las obras no van a "provincias" (ejem) hasta que no nos hemos cansado de verlas en los mandriles).
Borges es muy socorrido para el alma, matizaría; particularmente para su... lucidez.
ResponderEliminarEl cachito de Borges venía en el programa repitorrrrr; que no me gusta atribuirme méritos que no me corresponden. Eso sí... raro que se me escape algo por aquello de ser observadora y/o esponjilla.
En los mandriles es que estáis mu' enchufaos.
Según tengo entendido llevan dos años girando; el primero en Argentina. Y con éxito que pa' qué em ambos continentes. No me extraña ya que son tremeeeeeeeendos "pofesionales".Con lo cual me late en el segundo año ya habrán estado en tu city.